El afeminado señor de las moscas
Gigantesca cronica sobre la pelicula "Capote"
Las líneas tibias de su pelo reflejaban el sol casi al mediodía. El cigarrillo siempre a medio andar. La mirada amarilla. Capote camina por la avenida solo. Sostiene un libro con la mano izquierda, le tiembla todo. La escena desequilibra y se convierte en mi favorita. A nadie le gustan los escritores puros. Corte a, sobredosis. La vida de Capote fue tan intensa que la película no llega a gustar enteramente. A sangre fría nos regalaron a Philyp Seymour Hoffman actuando como si fuera su último papel, muerto ahogado, homosexual y alcohólico.
Casi nos llega a gustar. Capote, el personaje de si mismo sobrevuela la película, que no es más que un tibio homenaje a lo que era el realmente. El escritor aislado que andaba en boca de todos.
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